Salida y llegada: Añón de Moncayo (836m) Circular.
Desnivel positivo acumulado: 1100m
Tiempo empleado total: 4h 30min. contando abundantes paradas.
Distancia recorrida: 23.5km
Descarga la ruta en wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-carrera-por-montana/anon-de-moncayo-23k-102917446
Mapa con la ruta recorrida.
DESCRIPCIÓN:
Tercer domingo seguido en el que Carlos y yo haremos una ruta de trail superior a los 21km, equivalente a una media maratón. Esta vez llegamos a los 23km y medio pero además superando los 1000m de desnivel, lo que la convierte ya en una ruta exigente.
Quedamos muy sorprendidos por la belleza del recorrido, por las vistas que hay desde el pueblo de Añón y por la cantidad de agua que había por todos los lados. Merece una mención especial el Barranco del Horcajuelo, creo que es una de esas joyas que hay en Aragón y que pocos conocen. Precioso.
Bueno, madrugamos para llegar pronto a Añón y evitar las horas de más calor, así que poco después de las 8:00 empezamos a correr buscando la parte baja del pueblo en dirección sur y seguir por sendas llenas de vegetación. Vamos progresando por sendas cerradas y con bastante humedad ganando poco a poco altura, hasta salir a una pista que cruzaremos y tomamos otra senda a la izquierda y llegaremos a una zona más llana que recorreremos entre campos y eriales para ir entrando en una zona más revirada que bajando nos lleva al comienzo del primer barranco del día, el de Magullo. Cuando vamos por la mitad más o menos debemos estar atentos, y llevar el track..., para encontrar una senda muy escondida que sube muy fuerte para llegar a la zona alta del barranco, nuevamente entre campos. Seguimos avanzando ya por lo que será el segundo barranco del día, el de Los Moros, primero por una de las vertientes y luego pasaremos a la otra junto al torrente, que ya no abandonaremos hasta llegar al final de este barranco, en el collado de Las Estacas. Recorrer este barranco tiene también un aliciente muy especial, y es que estaremos viendo desde abajo en todo momento Las Peñas de Herrera, formaciones rocosas muy conocidas de esta zona del Moncayo y visibles desde muchos sitios.
Al llegar al collado de Las Estacas, paramos a beber y comer algo y debemos elegir en este punto si subimos al Cerro Morrón o lo bordeamos por la pista que lo sortea por el norte y que luego enlaza con la bajada del Cerro por el otro lado. Nosotros decidimos subir al Cerro Morrón aunque aquí se sube un poco por donde mejor se vea pues no veíamos apenas hitos. Después seguimos bajando por una zona donde hay que buscarse la vida porque tienes que ir más por intuición que porque haya hitos pero ya vemos abajo la pista a la que debemos llegar. Cuando llegamos a la pista, la cruzamos y correremos por una zona herbosa amplia en la que ya se atisba al fondo el comienzo del barranco estrella del día, el Barranco del Horcajuelo.
Cuando llegamos a la altura del torrente que bajará por el barranco del Horcajuelo, empieza a estrecharse ya y comenzamos un descenso muy corredero por la senda que sigue paralela al torrente cruzándolo en repetidas ocasiones. Al principio es roca, hierba y agua pero poco a poco va aumentando la vegetación en volumen y en altura, dejándonos unas estampas espectaculares pues pasaremos por zonas totalmente sombreadas rodeadas de vegetación al mismo tiempo que cruzamos el torrente que va cada vez más crecido. También pasaremos entre unos farallones rocosos que le dan un puntazo a la zona. Seguimos bajando y empezamos a notar el calor, el barranco se va abriendo y tenemos más sol sobre nosotros. Llegaremos a una minicentral eléctrica, la de Morana, y ya desde aquí prácticamente todo lo que falta es por pista, quitando un par de atajos que se hacen por senda entre el bosque.
En el km 18 empiezo a notar el cansancio y el calor va haciendo mella por lo que ya no puedo correr, solo andar y un suave trote ya muy cerca del pueblo. Cruzaremos el río Huecha y seguimos la pista que nos llevará al pueblo ganando las duras cuestas como colofón final...
Una ruta preciosa pero que se me hizo dura en su último tramo y es que esos kilómetros que se meten al final en este tipo de pruebas pasan factura, suelen ser en tramos ya muy abiertos y "aburridos" que con la suma del calor hacen mella.
Vistas de la sierra desde el pueblo, con casas "colgadas" en la roca.
