Salida: En la carretera a Francia, 1 km después del desvío a Sallent, junto a una tubería. (1380m).
Llegada: Punta Pazino (1965m) y más tarde Escarrilla (1120m).
Desnivel: Unos 600m de subida hasta el pico y unos 800m de bajada desde el pico hasta Escarrilla.
Tiempo empleado: Algo menos de dos horas a la cima, paradas incluídas. Una hora y media de bajada.
Cobertura de móvil: Generalmente buena en toda la actividad.
Travesía realizada junto a Iñaki y Juan Carlos.
Itinerario seguido para la travesía Sallent-Pazino-Escarrilla. |
INTRODUCCIÓN:
Ascensión ésta que en otra época no nos hubiera llamado tanto la atención pues se trata de un pico de altitud muy modesta al no llegar siquiera a los dos mil metros pero que tiene unas vistas que no tienen igual en toda la Bal de Tena. La dificultad es escasa y el tiempo que lleva subirlo también por lo que decidimos plantear la actividad como una travesía en la que iniciaríamos el recorrido por un sitio, Sallent de Gállego y lo concluiríamos en otro, Escarrilla, dándole así un aire más variado a dicha actividad. Ni qué decir tiene el hecho de que es necesario dejar un coche en el punto de inicio y otro en el final del recorrido.
ASCENSIÓN:
Una vez dejamos uno de los coches en Escarrilla nos dirigimos hacia nuestro punto de inicio. Para ello localizamos la gran tubería verde que baja por las laderas del Pazino y buscamos un sitio donde aparcar; lo hacemos en uno de los pequeños aparcamientos que hay al lado de la carretera, unos metros antes de la tubería. El monte en cuestión es visible en todo momento.
Vista del Pazino desde la misma carretera a Francia. |
Es domingo y diciembre por lo que en nuestro transitar por la carretera hasta llegar al lugar donde empieza la pista debemos tener cuidado con los muchos coches que suben a las pistas de Formigal.
Nota: En otra época del año y con menos nieve, se puede ir con el coche unos metros por la pista y dejarlo en un rellano que hay más adelante.
Hay la suficiente nieve cuando llegamos a la confluencia de la pista con la carretera que decidimos ponernos las raquetas ya y no esperar a hacerlo más tarde.
Comienzo de la jornada con la nieve al lado de la carretera. |
El comienzo es un zigzagueo para ir ganando altura de forma pausada, lo que nos sirve para entrar en calor y tomar contacto con las raquetas un invierno más. El día es despejado y el sol nos acompañará durante toda la jornada, un día de lujo.
Poco a poco vamos viendo cómo nos acercamos al bosque que tenemos enfrente, hasta aquí hemos encontrado varias marcas de pintura que señalizan el camino, no hay pérdida. Internarnos en el bosque siempre se agradece y si es en invierno aún le da un ambiente más especial.
Momento en el que nos adentramos en el bosque. |
El encanto de raquetear por un bosque nevado. |
La pena es que sea tan corto nuestro paso por el mismo, ya que en unos pocos minutos salimos ya al límite del bosque con las laderas que descienden del Pazino. En este punto aparecemos cerca de una torre que impulsa el agua de la tubería, aquí decidimos ir a saco por las laderas y resultó ser muy incómodo por la posición de las raquetas, a media ladera y cogiendo inclinación... mala cosa.
Haciendo una media ladera camino del collado. |
Luego hablamos que igual hubiese sido mejor tirar hacia arriba siguiendo el límite del bosque y llanear hasta el collado, pero bueno. Así que nos dirigimos a una vaguada que enfila directa hacia el collado del Pazino, para que de esta forma las raquetas tuvieran una posición más adecuada, de frente y no de lado.
Cuando llegamos al collado (1828m) el panorama es grandioso, se abre para nosotros el espectáculo de la Sierra de la Partacua cargada de nieve hasta los topes y destacando Peña Telera sobre el resto de cumbres.
La Sierra de la Partacua aparece ante nosotros al llegar al collado. |
Ya solo nos queda un pequeño esfuerzo, superar las rampas que nos dejarán en pocos minutos en la cima del Pazino, así que nos dirigimos ahora hacia nuestra izquierda (E) y buscando las zonas con nieve (las otras las ha pelado el viento) vamos encaminando nuestras raquetas hacia arriba.
Ya no queda nada para llegar a la cima. |
Los tres en la cima del Pazino (1965m). |
Al llegar arriba nos encontramos con el vértice geodésico tirado en el suelo, esperamos que sea cosa de las inclemencias del tiempo y no por otras causas... Desde la cima la panorámica se abre en 360º y podemos ver desde la Sierra de la Partacua al completo, pasando por los Infiernos, Arriel, Palas, Peña Foratata, el sempiterno Midi d´Ossau, Collarada, Punta Escarra y en fin, montones de cimas conocidas.
Vistas hacia Peña Foratata, Arriel, Palas, etc. Sallent abajo del todo. |
Zoom hacia Peña Telera, hermosa montaña. |
Tras un rato arriba haciendo fotos decidimos bajar de nuevo al collado donde sopla algo menos de viento y comer allí.
El descenso lo haremos por la vertiente de Escarrilla. Para ello, desde el collado vamos bajando por suaves lomas nevadas acercándonos a un torrente que discurre hacia el barranco de Escarra.
Bajando de regreso por la vertiente de Escarrilla. |
Vemos en unos minutos un cartel señalizador con flechas; aquí tenemos que girar hacia la izquierda y seguir la dirección que pone Sallent; la opción de la derecha nos llevaría a la presa de Escarra. Ahora el camino es estrecho pero lo suficientemente ancho para caminar con las raquetas. Vamos rodeados de bojes y en un punto determinado, a la media hora más o menos encontraremos otro desvío; una flecha marca hacia Sallent y la otra a Escarrilla, tomamos esta última que es el camino de la derecha. A los pocos metros empieza a haber bastante menos nieve y es que esta vertiente es Sur y al menos hoy, le está dando el sol con ganas, así que nos quitamos las raquetas y llegamos pronto a un punto en el que se desciende abruptamente al lado de unos cortados hasta llegar de nuevo al bosque, en este caso ya por pista ancha y con ejemplares arbóreos de bastante más porte que los humildes bojes de más arriba.
Disfrutando del camino ya cerca del pueblo de Escarrilla. |
Unos minutos de tranquila bajada por este bonito lugar y la pista nos dejará en la boca sur del túnel de Escarra. Ahora solo hay que ir a por el coche y buscar el otro vehículo que hemos dejado cerca de Sallent.
En resumen, una bonita vuelta a estos parajes, con cima incluída, que en invierno adquieren un aspecto muy diferente al que podemos ver el resto del año. Otra época bonita para disfrutar de este recorrido es el otoño por las tonalidades que adquiere el bosque.
Con esta modesta cima damos por concluído el año montañero 2008 que ha sido muy prolífico en cuanto a picos ascendidos.